Fecha: Marzo - 2,011
Lugar: Costa Verde - Distrito San Miguel
El clima para los primeros días del mes de marzo ha estado medio rebelde, al menos para los distritos ubicados cerca al mar, una neblina intensa cubre el litoral, inicia en las noches, incrementa en la madrugada y permanece hasta bien entrada la mañana, tengo la suerte de vivir en San Miguel, un distrito colindante al mar, pero también tengo la suerte de no vivir tan cerca del litoral, unos tres kilómetros separan la urbanización de la orilla....., lo cuál evita en sobre manera el ingreso de la niebla, aún así, amanece oscuro casi como un día de invierno. Esta brisa marina viene acompañada de un intenso frío, obligandome a desempolvar algunas casacas dryfit para continuar con mis entrenamientos mañaneros.....
El día de ayer no fue la excepción, el programa indicaba correr por una hora, desperte temprano presto para arrazar con el duro asfalto, pero al abrir las persianas me tope con una escena propia de pelicula de terror, casi podía escribir mi nombre en medio de la densa neblina, estuve a punto de retroceder en el intento de salir temprano a entrenar, menos mal que más fueron mis ganas de empezar el día sudando un poco de toxinas que el miedo de aventurarme a trotar por las playas, una vez que la puerta de casa cerro detrás mío no había vuelta para atrás, lentamente fui avanzando por las calles del barrio, que a esa hora aún lucían despejadas......, luego de 20 minutos entre más en confianza y aprete el paso, el Garmin indicaba un pace de 05:20 min/km, una velocidad en la que me desplazo con comodidad para distancias largas.....
Al llegar a la playa el panorama era impresionante, la neblina acumulada durante la madrugada no permitia ver más allá de un par de metros, la adrenalina fluia por mis venas, interesante resultaba seguir avanzando, es un camino que conozco de memoria pero al no ver el horizonte se volvia hasta tenebroso, me detuve un instante, mire hacia el camino por donde había venido observe que la niebla también cerraba filas, así es que decidí seguir avanzando, mantenía mi pace pero sentia que el corazón se me aceleraba, no por el esfuerzo sino por la incertidumbre de no saber si más abajo la neblina estaría más densa......, conforme iba avanzando me di cuenta que la niebla estaba despejando, algunos rayos de sol se abrían paso en medio de esa oscuridad, provocando que las pequeña gotitas se deshicieran sobre el pavimento como suaves gotas de rocío....., avance por 35 minutos con destino a San Isidro para luego iniciar el retorno, que fue mucho más tranquilo pues el nivel de palpitaciones había regresado a su rimo de entreno normal, la niebla se mantenía espesa pero se había despejado la incertidumbre, con más aire decidí acelerar el paso.....
Inicio de la bajada hacia la Playa...seguimos entrenando.........???
En casa unas tostadas cubiertas con mermelada de fresa y un gran vaso de jugo de papaya cerrarian mi entreno mañanero......días de incertidumbre y emoción que no me quiero perder.....!!
1 comentario:
Excelente Blog, te hemos agregado a nuestro directorio de Blogs de Iberoamericanos. Sdos
http://www.soymaratonista.com/198/blogs-de-corredores
Publicar un comentario