Finaliza el mes de marzo, con pena veo mientras avanzo con mi bicicleta en medio de las tinieblas como se aleja la estación veraniega, la dulce neblina ha empezado a apoderarse de las madrugadas, invadiendo cada centimetro de espacio que encuentre disponible, gotitas heladas viajan por el espacio esperando encontrar a su paso algún ser de sangre caliente donde pueda evaporarse, he recurrido nuevamente a las camisetas de manga larga, la idea es salir abrigado y ligero de ropas a la vez, la idea es soportar el impacto que se siente al salir de casa luego de haber estado abrigado y aún casi dormido para pasar al lado oscuro y frío....., estas semanas he logrado mayor intensidad, dedicarle mayor cantidad de horas al entrenamiento, el programa que estoy siguiendo con Daniel ha ordenado mis tiempos y frecuencias para cada tipo de actividad.
Todavía me siento pesado, he subido a la balanza un par de veces y no he vuelto a bajar ni un gramo desde el mes de enero, cuando pase de 80 a 79 kilos, me sirve de consuelo haberme mantenido en ese peso...., me parece que he mejorado sobre la bicicleta, el último sábado, al menos pude soportar el ritmo endemoniado de los ciclistas por casi 30 kilómetros, y luego lograr mantener una media de 33kms/hora en los 30 kilómetros de regreso que me toco hacerlo solo de San Bartolo a Lima, ese día cerré mi entrenamiento sabatino con un trote de 7k con un pace de 5:20 min/km en un escenario para más espectacular como son los pantanos de Villa.
Que barbaro estos muchachos (los ciclistas) por ratos lograban sostener velocidades de 48 kms/hora, yo andaba agazapado y dandole duro al pedal para no soltarme del grupo, las piernas las sentía muy calientes, ya no sabia como esconderme en medio del grupo, cuando parecían que iban a estallar los musculos empezó lo más dificil, el par de subidas que hay para llegar a San Bartolo, ahí sí..., por ratos quede sin aliento, sentia que me ahogaba con mi saliba, pero no pensaba abandonar......., menos mal no fui el único, asi es que reagrupandonos los "rezagados" logramos alcanzar al pelotón que menos mal tampoco había avanzado muchos metros...que tal experiencia, un par de meses atrás hubiera quedado en solitario en los primeros 15K, está vez no fue así logre sostener el paso....alce la mirada y ya podía divisar el desvío a San Bartolo, deje que el pelotón siguiera su camino para iniciar mi solitario retorno a Lima...., me agradan estos regresos en soledad pues me permiten medir mis fuerzas así como mi grado de preparación, ir con el pecho al viento es el mejor entrenamiento para un triatleta, no me fue tan mal, logre sostener una muy buena performance......., el sol asomaba con timidez pero dejaba sentir su calor sobre mi espalda, estaba a menos de dos kilómetros de Lima, ya más tranquilo y contento con ese sabor que te queda en la piel de haber hecho un entrenamiento de primer nivel....
Se aproxima mi primer evento del año, La Copa Continental de Triatlón que se disputará el domingo 03 de abril en uno de los escenarios más lindos y soñadores que tiene la ciudad de Lima, el distrito de la Punta en el Callao acogerá a un centenar de atletas nacionales e internacionales...., mi objetivo es evaluar mi grado de avance del primer trimestre del año... ahí nos vemos...!!!
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