seis horas de ciclismo

El entrenamiento del sábado incluia 6 horas de pedaleo, simulando el circuito que se realiza en Brasil, es decir, hariamos largos de 45 Kilometros, saliendo del Grifo PRIMAX en el kilometro 19 avanzaríamos 45 K, más o menos a la altura de Chilca, para luego regresar al Kilometro 19, y nuevamente salir hasta Chilca y finalizar en el kilometro 19, es decir dos vueltas Lima - Chilca - Lima.

Alimentación
Es importante cuidar la hidratación y alimentación en el camino, son seis horas, por lo que constantemente hay que estar con el estomago entretenido, esta vez lleve conmigo, 200 gramos de fruta seca, pasas, habas, almendras, pecanas, una mixtura que no incluye el maní porque particularmente me cae muy mal, me produce mucha ácidez, también me preparé un par de sanguches de pan dieta blanco, con jamón de pavo untado en mantequilla, tres sobres de power gel, uno de ellos con 1x de cafeína.

Hidratación

Salí con dos botellas cargadas de gatorade color rojo, personalmente es el sabor que mejor me sienta, en el camino compre una botella de agua mineral sin gas y una botella de coca - cola. Fue toda la hiratación utilizada en el camino.

Los primeros 45K

- Salimos 6:15 AM aproximadamente del PRIMAX, estuve acompañando a Jorge y Gillian Pun hasta la altura de Santa María, en la subida de Pucusana los Pun me pasaron, pero alcance al grupo con el terminaría pedalenado finalmente, Mónica, Vincent, y Atilio....a una velocidad de 30 Km/h llegamos en 1 hora y media a Chilca, donde me separé del grupo.

90 K con fuerza

- De regreso a Lima, decidí apretar el acelerador, me sentía con fuerza y confiado, trepe nuevamente Pucusana a buen ritmo, una vez en la cima me deje caer, aceleré en plena bajada, alcanzando 60 Km/h, en plano pude desarrollar y sostener 45 Km/h , no había viento en contra, me sentía bastante bien, recién habían transcurido dos horas, ya estaba en el los primeros 65 kilometros de recorrido, a una media de 31 Km/h.

- He estado sufriendo mucho con el último tramo para llegar a Lima, a partir del puente Arica (Km 36) no desarrollo una velocidad adecuada, voy entre 26-27 Km/h pero me permití probar un nuevo cambio, con el plato chico y el piñon chico avance lo más que pude, mi sorpresa fue mayor cuando me percaté que podía sostener ese ritmo, el velocimetro se disparo a 33 Km/h....a pocos metros ya divisaba el puente Huaylas, mire mi cornometro marcaba 02 horas 55 minutos para 90 Kiómetros, primera vez que bajaba la marca de tres horas, mi mejor tiempo en esa distancia eran 3 horas 10 minutos, y no incluía dos trepadas a Pucusana....pero tamaño esfuerzo estaba por pasarme la factura.

Segunda vuelta, el sufrimiento

- Sobre el puenteHuaylas, busque en el horizonte para ver si podía divisar a algunos de los tres chicos con los que llegué a Chilca, nada....sobre el pavimento de la Panamericana Sur, solo se podían ver autos, buses y camiones que raudos avanzaban hacia la ciudad de Lima, el desgaste de ese último pique había sido notable, mi cuerpo aún resentido por la gripe, no estaba respondiendo adecuadamente, decidí tomar de golpe una botella de gatorade, mientras avanzaba nuevamente hacia el Sur, pensaba que lo mejor era tratar de llegar al puente Arica y regresar para esperar que el resto terminará el entrenamiento, o sino irme a descansar a casa, por último 120 kilometros de entrenamiento no estaba nada mal, pero seguía pedaleando, ya sin escolta mi preocupación era mantenerme muy pegado a la pista auxiliar, estaba solo, pero seguía avanzando, comí un puñado de fruta seca, a un ritmo de 27km/h, mi cuerpo estaba recuperándose, pare para soltar las piernas y buscar nuevamente en la serpenteante panamericana sur si alguno de los chicos se aproximaba, pero nada.....me volví a subir a la bici, ya estaba atravezando el puente Arica, no había marcha atrás, el siguiente regreso era Santa María, me propuse llegar hasta allá y luego decidir si regresaba, pero no fue así, pase Santa María a buen ritmo, definitivamente mi velocidad cayó bastante a un ritmo de 24 Km/h pero sentía que las piernas ya estaban de nuevo conmigo, tome la subida a Pucusana, 3 kilometros de puro sudor, pero tomada la cima, el resto es adrenalina, velocidad, vertigo, de un impulso ya estaba nuevamente en Chilca, lo había logrado, el computador marcaba de recorrido 138 kilometros, antes de continuar, decidí ingresar al Grifo, me había quedado sin gatorade, me pedí una botella de agua mineral sin gas, y una coca cola heladita para comer mi sanguche con jamón de pavo, en la tienda un grupo de motociclistas tomaba un respiro, se les notaba cansados y sedientos, se fascinaron mucho al ver mi bicicleta, varios de ellos me pidieron permiso para cargarla, y comprobar que es muy ligera....a pesar que soy consciente que no lo es tanto. Habían transcurrido unos 10 minutos, cuando a lo lejos vi que se acercaba el grupo de Vincent, Mónica, Atilio, ahora también estaba Lucho y un señor que primera vez veía en la ruta, rápidamente termine de vaciar los liquidos en mis botellas y salí a darles el alcance.

últimos 45K la masacre

- ya estaba con el grupo nuevamente, ya completos salímos de Chilca con destino Lima, faltaban los últimos 45 Kilometros, avanzamos en grupo para tomar la subida de Pucusana, muy pero muy fuerte, pensé que me dejarían, al ver que Vincent, Atilio y ese señor que recién veía se alejaban, menos mal que tras de mi seguían Mónica y Lucho, eso me daba cierta tranquilidad, el problema fue cuando ví que Mónica empezó a pasarme....chsssss detrás de ella estaba la camioneta escolta, si me pasaba la camioneta se pondría detrás de Ella, y luego alcanzar al grupo sería difícil, con el corazón en la mano, avance hasta estar nuevamente delante de Ella, pero la subida es larga, y Mónica en un rato más estaba pasándome, y con Ella la camioneta escolta, menos mal que oucrrió cuando estaba a poquisimos metros de la cima, así es que nuevamente pude darle el alcance, en la bajada, aproveche para acelerar, pase a Mónica, luego a Atilio, y finalmente a Vincent, estaba delante del grupo, pero duro poco tiempo, al rato ya los tenía a Vincent y Atilio detrás mio, y un momento delante mío.

La siguiente subida es la que está pasando el peaje de regreso a Lima, altura del KM 48, en un arranque nuevamente me había puesto delante del grupo, tome la trepada con entusiasmo, pero antes de llegar a la cima, nuevamente estaban Vincent y Atilio pasándome, esta vez me asegure de estar a buena distancia de la camioneta escolta. Una vez más en la cima, aproveche la bajada para ponerme por última vez delante, digo última vez, porque a los pocos kilometros me pasaron nuevamente, pero esta vez no hubo forma de alcanzarlos...uffff vi como los dos chicos se alejaban hasta perderlos de vista, me sentía agotado con tantos arranques, decidí darme un descanso, baje la velocidad, estire sobre la bici, tome agua, un poco de coca-cola, di una mirada hacia atrás, pero la escolta no estaba a la vista, Mónica y Lucho andaban muy atrás, revise el computador me indicaba 170 kilometros de recorrido, tome mi último power gel, con 1x de cafeína, aceleré hasta alcanzar los 35 Km/h, un último esfuerzo y ya estaba en Lima, había podido nuevamente alcanzar a Vincent y Atilio, ellos ya subían el puente Huaylas, me vieron llegar me esperaron, juntos arribamos al PRIMAX.

Resultado: 184 kilomeros en 6 horas y media a 27.7 Km/h.....

Con Lucho hicimos un ida y vuelta a trote suave hasta la Playa de Villa, más o menos 8 K en 42 minutos, hora de volver a casa, con la satisfacción de un buen entrenamiento....

En casa, Erika y Alfonsito estaban listos para ir a almorzar a la casa de mi mamá, me esperaron mientras tomaba un baño, ya en la casa de la viejita, unas papas rellenas, arroz con lenteja y pavo, agua de manzana, y mazamorra morada, como las hacían antes, nos esperaban....que rico.