viernes, 31 de julio de 2009

Seguimos con frío...


Muy frias las mañanas limeñas, el termómetro marcó los 16 grados centígrados, con una húmedad perenne del 90%, si tomamos en cuenta que tenemos una temperatura corporal de 35 grados, explica porque sentimos tantísimo frío, los pulmones casi respiran agua, sino fuera por la eficiencia de mi despertador, sería imposible levantarme de la cama, lugar donde permanezco perdido en medio de dos frazadas y un edredón de plumas de ganso, calentito, con las ventanas y puertas completamente cerradas para evitar que ingrese cualquier ráfaga de viento......ayer, incluso, encendí por algunos minutos una vieja estufa que encontré el otro día mientras ordenaba el almacén, pero el cuarto se calento demasiado, ya no podía dormir, en medio de las tinieblas me levante y la apagué....desperté de buen ánimo, 05:50 AM, asome la mirada por las cortinas, aún era de noche, cogí mi ropa deportiva, cargue una botellita con agua, aliste mi bicicleta y enrumbe al club.......pistas mojadas, ligera llovizna, las luces de los postes alumbraban las finas gotas que caían lentamente, ni los perros ladran, acurrucados al costado de las casetas de los vigilantes, solo atinan a mirar.


Buscando el lado positivo, me gusta la lluvia, mientras avanzo, me siento más mortal que nunca, con más miedo, pero sin temor, me obliga a redoblar mis medidas de seguridad, a estar más atento al camino, a los pocos autos que circulan a esa hora de la mañana, con un oído que en este tiempo se ha ido afinando tanto, que podría identificar, através del sonido del motor, a una cuadra de distancia, la marca, el año y el modelo del auto que se acerca, incluso la velocidad...ja,ja.


Una hora diaria en el gimnasio, dedico 40 minutos en ejercicios cardio vasculares y 20 minutos en potencia, notese que si están en un intento desesperado por mejorar la figura, es el momento idóneo, toda vez que el cuerpo naturalmente está quemado más calorías para sostener su temperatura corporal, por ello, en estos días nos va a exigir mayores dósis de alimentos, sobre todo privilegia la ingesta de dulces, chocolates, harinas......., tenemos dos opciones, responder positivamente, es decir, aceptar los nuevos requerimientos o negativamente, mantener la misma cantidad de alimentos, es decir no comer ni un gramo más, obviamente esta actitud va a provocar que pasemos mucho "dolor", pues el cuerpo va a reaccionar enviando sensaciones intensas de frío, la respuesta es comprarse un buen abrigo, y comer más seguido, es decir dividir las comidas "grandes" en pequeñas porciones.....por ejemplo, el desayuno usual compuesto de dos panes, realizarlo en dos actos, un pan en la hora normal y guardar el otro pan para las 10 AM.....great idea..!!!


Menos mal que no necesito esa terapia, y me puedo dar el gustito de comer mis chocolatitos....ají.

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